Como en toda organización humana, habrá situaciones de discordia, de intolerancia, de no aceptación de la diferencia, como factores que llevan a distintos niveles de violencia, si no se afrontan con inteligencia y las estrategias adecuadas a cada circunstancia. Los directivos, coordinadores y jefes de proyectos han de estar atentos a estos brotes de inconformidad y actuar como primeros agentes ante el conflicto.